Maternidad real: entre desvelos, amor infinito y pequeños triunfos diarios
Desde el momento en que te conviertes en mamá, el mundo parece tener una lista interminable de expectativas sobre cómo deberías actuar, sentirte o incluso lucir. Pero la verdad es que la maternidad está lejos de ser perfecta. Está llena de emociones encontradas, noches sin dormir y muchas dudas... y eso está bien. Ser madre no significa tenerlo todo bajo control, sino estar ahí cada día, con amor, incluso cuando el cansancio pesa. Validar lo que sientes, ya sea alegría, miedo, cansancio o frustración, es parte del proceso.